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Túneles de Hidroituango tendrán tubería metálica por el estado del macizo

Hasta que la firma canadiense Klohn Crippen Berger no entregue el estudio patológico sobre el estado de las estructuras subterráneas de Hidroituango no se conocerá a ciencia cierta cómo está la casa de máquinas y cavernas del proyecto.

Este estudio, según William Giraldo Jiménez, vicepresidente de Proyectos de Generación de Energía de EPM, se retomará a finales de este mes y espera conocerse a mediados de julio. El informe será la base para diseñar la reparación que requieren dichas estructuras.

La preocupación por el estado del macizo rocoso se reavivó el pasado sábado cuando fue necesario evacuar de manera preventiva a 105 trabajadores del proyecto, debido al aumento de filtraciones presentadas en la zona de entrada de agua del embalse hacia las conducciones de la unidad de generación número cuatro.

El aumento de las filtraciones se registró mientras un frente de 40 personas adelantaba el reforzamiento de uno de los tapones de concreto ubicado entre el embalse y las compuertas auxiliares.

Ese día se cerraron por prevención las compuertas auxiliares de captación de las unidades tres y cuatro.

Giraldo explicó que los tapones ubicados en esa zona se reforzarán para garantizar la seguridad de los operarios. Adicional, se realizarán inyecciones de concreto para disminuir las fugas en la zona. Un grupo de expertos brasileños asesorará la maniobra.

¿Cómo está el macizo?
Giraldo confirmó una alteración o movimiento del material del macizo rocoso en la zona donde están construidos los túneles de captación cinco, seis, siete y ocho, ocasionado probablemente, durante el cierre de las compuertas de los túneles uno y dos (16 de enero y 5 de febrero) o por el derrumbe de Romerito, registrado en mayo de 2018 en el comienzo de la contingencia.

“No es cierto que sea otra oquedad. No es un vacío, es que la zona no tiene la misma contextura que se tenía cuando se hicieron los túneles de las conducciones cinco a la ocho”, señaló.

El funcionario añadió que desde hace varios meses están haciendo perforaciones desde distintas galerías, extrayendo muestras de material y realizando inyecciones de cemento de tal manera que se confine la roca mientras pueden ingresar por los accesos de la casa de máquinas y hacer otro tipo de revisiones.

La socavación existente hasta ahora se halló entre los túneles uno y dos de captación el 3 de enero, de 80 metros de largo por 20 metros de ancho. La reparación requerirá de 70.000 metros cúbicos de material, el contenido que cabría en 28 piscinas olímpicas.

Tubería metálica en túneles
Giraldo explicó que para sortear la oquedad entre los túneles uno y dos y la alteración del macizo entre los túneles cinco al ocho se implementará tubería metálica en los ocho túneles de presión.

La novedad es que el mismo procedimiento se desarrollará en las conducciones tres y cuatro, hecho que no estaba contemplado en el comienzo.

Esta tubería, de 160 metros de longitud, 6,2 metros de diámetro y dos pulgadas de espesor, conducirá el agua del embalse hacia la casa de máquinas. Dicho revestimiento será comprado a una firma italiana, añadió Giraldo. Luego de instalarlos se implementará un anclaje al concreto para darle solidez a la estructura. La fabricación se hace en Colombia y la instalación tomaría seis meses por unidad, aunque se harán en simultánea para ahorrar tiempo.

“El revestimiento metálico le dará contexto y seguridad. Luego se harán apoyos con concreto a la roca para anclarlos”, especificó Giraldo.

Las obras subterráneas no se han podido inspeccionar en su totalidad porque no ha terminado el drenaje del agua. Falta ingresar a los túneles de descarga y a la almenara sur.

El estimado de EPM es que la primera unidad empiece a generar en el año 2021.

Fuente: El Colombiano