El lanzamiento del expresidente de la Mesa Minera, Eliober Castañeda, a la alcaldía de Segovia, Antioquia, solo busca un objetivo: que la minería ilegal controle la administración de ese municipio.
Por David Cardona
Los mismos mineros han denunciado las pretensiones de ese vocero, quien en reiteradas ocasiones negó tener en mente aspiraciones políticas. Pero las críticas fueron ciertas y eso quedó en evidencia a finales de noviembre de 2018, cuando renunció a su gremio.
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Desde entonces, emprendió la carrera hacia el gobierno municipal y los residentes se mantienen alerta, pues esto significaría que buscará mayor avance de la minería ilegal en Segovia.
Este problema también supondría que los grupos irregulares que tienen control sobre diferentes zonas de explotación en Antioquia puedan obtener algún beneficio de una administración que apoye la actividad al margen de la ley.
A principios de enero de 2019, la Mesa Minera convocó a varias protestas en contra del desalojo de minas invadidas que, legalmente, están adjudicadas a otras empresas como la Gran Colombia Gold.
Ante ese panorama, los titulares legales de extracción de oro temen que pueda reproducirse este comportamiento también en Remedios y Marmato y propiciar hechos violentos como los ocurridos en el paro de 2017, que dejó 3 muertos y más de 50 heridos.