Con la aprobación del proyecto de Ley de Financiamiento, el Gobierno estará en capacidad de obtener tan solo cerca de la mitad de los $14 billones requeridos para financiar el faltante del Presupuesto de 2019 lo que implicaría adelantar un recorte presupuestal que podría llegar a tocar algunos de los programas de gasto social que no contaban con la partida necesaria para ser viables.
Y es que a pesar de que el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, dijo tras la aprobación del proyecto de Ley el pasado 19 de diciembre que se intentaría minimizar el ‘apretón’ de los rubros sociales, estimó que el recorte total del gasto sería este año de $1,2 billones y que podría llegar a mediano plazo a $5 billones. Además, indicó que más adelante se revisará la política de subsidios.
Ello significa que este ‘tijeretazo’ no solo podría salpicar a algunos programas sociales del sector de la salud, la educación, la vivienda o el transporte que se encontraban desfinanciados, sino que el Gobierno tendría que hacer en los próximos meses las cuentas necesarias para ver qué parte del gasto público reduciría sin dejar de cumplir la regla fiscal.
La República