Las investigaciones revelaron que los capturados tendrían una relación cercana con la víctima.
La Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, en un trabajo conjunto con la Fiscalía, logró esclarecer en tiempo récord el homicidio de Juan Camilo Solano, ocurrido el pasado 14 de septiembre en el barrio Laureles de Medellín. Dos personas, un hombre y una mujer, fueron capturadas y deberán responder por los delitos de homicidio agravado, tráfico, fabricación o porte ilegal de armas de fuego y hurto calificado y agravado.
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El crimen, que inicialmente conmocionó a la comunidad por el hallazgo del cuerpo abandonado en el corregimiento de San Cristóbal, fue resuelto gracias a la labor investigativa del Grupo de Vida de la Seccional de Investigación Criminal. Durante 34 días, los investigadores recopilaron elementos materiales de prueba y evidencia física que permitieron identificar y capturar a los presuntos responsables.
Las investigaciones revelaron que los capturados tendrían una relación cercana con la víctima. Al parecer, el homicidio se habría perpetrado en una vivienda de Laureles, tras lo cual los sospechosos transportaron el cuerpo hasta San Cristóbal para abandonarlo en la vía pública.
La principal hipótesis que manejan las autoridades apunta a que el crimen se habría originado por desacuerdos en negocios que la víctima mantenía con uno de los victimarios.
Así lo confirmó el brigadier General William Castaño Ramos, comandante Policía Metropolitana del Valle de Aburrá.
Es importante destacar que, en lo corrido del año, se ha logrado un 40% de esclarecimiento en este tipo de delitos, gracias a los procedimientos de captura en flagrancia y mediante orden judicial.
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Según el reporte de las autoridades, dos hombres que se movilizaban en una motocicleta llegaron a la casa de la víctima y, tras exigir que saliera, dispararon cuando este abrió la puerta. Castaño Castro recibió heridas en la región maseterina y el muslo derecho que le causaron la muerte.
Este hecho se suma al asesinato de Luis Serna, conocido como “El Crespo”, ocurrido en la zona del Páramo del Oriente antioqueño. Serna fue atacado al interior del establecimiento comercial que administraba.
Las autoridades se encuentran investigando ambos casos para determinar los móviles y dar con los responsables intelectuales y materiales de estos crímenes.