Alias Macaco: Un Compromiso Renovado con la Verdad y la Reconciliación

Alias Macaco: Un Compromiso Renovado con la Verdad y la Reconciliación

Un compromiso auténtico con las víctimas

En el marco del proceso de paz total impulsado por el gobierno de Gustavo Petro, la figura de Carlos Mario Jiménez, alias Macaco, ha empezado a destacarse no solo por su pasado como comandante paramilitar, sino por su voluntad genuina de contribuir a la reconciliación nacional. A diferencia de otros exjefes de las Autodefensas, Macaco ha mostrado una actitud coherente, directa y sin ambigüedades frente a su responsabilidad con las víctimas y con el país.

Durante su reciente regreso a Montería, acompañado por Salvatore Mancuso, alias Macaco participó activamente en la firma de nuevos compromisos con la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas (UBPD). Sus palabras fueron claras y sentidas: “Seguiremos luchando para que este proceso de búsqueda llegue a un feliz término con la cooperación de todos. Estamos para aportar y, vuelvo a ratificar, perdón a todos, de corazón”.

Un contraste evidente frente a otros excombatientes

Mientras otros exjefes paramilitares acogidos a la resolución 453 de 2024 han mantenido posturas ambiguas o han tenido poca visibilidad en sus compromisos con la justicia restaurativa, Macaco ha asumido una actitud proactiva y transparente. Su presencia continua, su disposición a colaborar directamente con las familias de los desaparecidos y su lenguaje enfocado en la reparación simbólica y material lo diferencian del resto.

La directora de la UBPD, Luz Janeth Forero, destacó que este tipo de participación activa permite avanzar no solo en la búsqueda, sino también en la sensibilización de la sociedad frente al derecho a la verdad. Y en ese proceso, el papel de Macaco ha sido especialmente significativo.

Hacia una paz con acciones, no solo palabras

Alias Macaco demuestra que la construcción de paz no depende únicamente de decisiones políticas o acuerdos formales, sino del compromiso personal con las víctimas y la memoria histórica. Su caso resalta que, incluso desde un pasado violento, es posible adoptar una actitud transformadora, basada en la voluntad genuina de reparar. Si bien el camino es largo, figuras como la suya abren la posibilidad de un futuro donde la verdad y el perdón ocupen un lugar central en la reconstrucción de Colombia.